La última tendencia de su aplicación, se ha extendido no solo a su comercialización en la región, sino a ser un punto intermedio de almacenamiento, para su próximo tráfico a las zonas asiáticas y orientales. Influyen para el aumento de su utilización, otras técnicas y modos de operar de los narcotraficantes, pues por más protegida que se encuentre la carga al concertarse el acuerdo de voluntades entre las corporaciones o sociedades, no puede llegar a un puerto un contenedor con paquetes de sustancias enervantes de la clase que sean; sino que, dentro de las mercancías que se pretenden transportar por razón del negocio jurídico, se introducen, y más que eso, se esconden, los tóxicos, para burlar a las autoridades; este procedimiento se realiza de las formas más inimaginables, se colocan las drogas dentro de productos alimenticios, cosméticos, prendas de vestir y calzados, efectos electrodomésticos, y todo tipo de artículo.
Este medio de transporte es característico, del mismo modo, por ser de escaza revisión por los funcionarios, dada la enorme cantidad de objetos que se transportan y por la legitimidad de los contratos que los protegen de cierta forma. Se identifica, también, por la búsqueda de nuevas rutas de tráfico que impidan, que este medio de transporte sea intervenido; e incluso, se basan de métodos engañosos al momento de arribar al puerto, esto se evidencia en los casos, que se aprovechan del arribo de varios buques de carga, para la entrada del barco que transporta los alucinógenos. El otro punto típico de la transportación de los enervantes es la amplia red de corrupción que debe crear y fomentar para el descargue de estas sustancias.
¿Cuáles son los servicios que ofrece el abogado penalista en estos casos?
En el supuesto que un sujeto resulte arrestado y detenido, por la transportación de drogas utilizando la vía marítima de carga de contenedores, el servicio que proporciona el abogado penalista, es el de un asesoramiento directo del asunto; lo que realiza mediante un trabajo individualizado al sujeto; esto es, en el primer orden, comunicarse con la persona que contrata sus servicios, para conocer como acontecieron los hechos ,y de forma inmediata, informarle que su conducta constituye un delito de tráfico de drogas, el que, por las consecuencias que genera, posee un marco sancionador muy elevado.
En lo adelante, el letrado debe estudiar el contenido del contrato, para avizorar cuestiones que eximan de culpa a su defendido, pues en muchos casos el que transporta los contenedores, que obviamente es el sujeto que resulta apresado, no es el que carga las mercancías, y no conoce del ilícito que a sus espaldas fue perpetrado. De la misma manera, indagará en los acontecimientos relacionados a la carga, porque el buque en muchas ocasiones requiere hacer estancia breve en diferentes países antes de llegar a su destino, principalmente para abastecerse de alimentos, combustible, y demás bienes de logísticas; y este puede ser el momento oportuno para adulterar la mercancía.
Siendo estas cuestiones investigadas por el jurista, sin obtención de resultados positivos, debe continuar con el asesoramiento típico en estos casos, evaluando las circunstancias de la detención, el cumplimiento de sus formalidades, el modo de comunicación con los familiares y el plazo de la detención. Debe en este específico, vincula a la entidad para la que trabaja su defendido, para que declare en la audiencia final y en aras de que, asuma parte de la responsabilidad de los ilícitos que han sido consumados. El abogado ofrece por demás, la defensa intrínseca de los derechos inalienables de su cliente.